Una buhardilla forma parte de una vivienda plurifamiliar y esta situada en la última planta inmediatamente debajo del tejado. Tiene todos o varios de sus espacios debajo de los techos inclinados con tragaluces que permiten la entrada de luz natural y ventilación del espacio. La buhardilla es una estructura arquitectónica que se ha utilizado durante siglos como una opción para maximizar el espacio de una construcción. A lo largo de la historia han sido utilizadas para diversas funciones, desde espacio de almacenamiento hasta para vivir, adaptadas a las necesidades y gustos de cada habitante. Al estar ubicadas en la parte superior de un edificio, una buhardilla ofrece la privacidad y tranquilidad creando un ambiente agradable para estar y el confort en la vida urbana.

Al espacio de una buhardilla con techos especialmente bajos, se le saca el máximo partido con el mobiliario a la medida aprovechando cada centímetro para almacenamiento. Las zonas bajas se pueden aprovechar para determinadas zonas de dormitorio.
Las buhardillas son un espacio arquitectónico singular que ha ganado gran popularidad en los últimos años. Son una opción popular de vivienda en el centro de la ciudad y también como alojamientos turísticos.
Es frecuente que muchas buhardillas pertenecen a la segunda planta de los áticos-dúplex y muchos áticos son abuhardillados, solo que la buhardilla no cuenta con una gran terraza.