El contrato de reserva debe cumplir y poseer las condiciones pactadas entre comprador y vendedor para que sientan las bases de un posterior contrato de compraventa.
A través de este acuerdo el comprador se reserva la compra de un inmueble a cambio de una cantidad de dinero (que se conoce como señal o reserva) a cuenta del precio del inmueble. No hay una cantidad fija, pero suele estar entre 1% y 5% del precio. El vendedor se compromete a entregar la vivienda en el plazo acordado. Este tipo de contrato se utiliza con frecuencia cuando la vivienda está en construcción o cuando aún no se ha iniciado su construcción y obliga al vendedor a entregar el inmueble en condiciones pactadas.
